sábado, 8 de agosto de 2009

Exposiciones de principios



Iba a llamar esta entrada "Filth is my politics, filth is my life", que es la parte central del credo político de Divine, tal como lo expresa en este fragmento, delirante y fabuloso, del final de "Pink Flamingos". Si no la habéis visto, haceos con ella y vedla. No tiene desperdicio. "I have done everything".

Más en serio. Leo en los blogs, tanto en entradas de los mismos como en comentarios a las mismas, declaraciones de definición política. A mí me parece muy valiente, a estas alturas de la película, definirse de derechas o de izquierdas. Sinceramente, yo apenas veo diferencias palpables entre "unos" y "otros". Mi experiencia me dice que los gobiernos se forman a base de devolver favores a quienes apoyaron a los partidos políticos que ganan las elecciones y las diferencias reales son mínimas. Ya lo escribí en otra ocasión, en un alarde de cinismo y de sinceridad: los gobiernos, los políticos, te echan un huesillo de vez en cuando (matrimonio homosexual, memoria histórica, bandera de 300 metros cuadrados en la plaza de Colón de Madrid, unidad frente al terrorismo, educación para la ciudadanía, traslado del archivo de la guerra civil, etc, etc, etc) para que vayas royendo, te conformes con lo que tienes y no te des cuenta de que otros deciden por ti y puedan seguir abusando del sistema y robando a gusto. Tú, a pagar la hipoteca y los impuestos. Que ya se ocupan de ti desde el gobierno, la comunidad autónoma, el ayuntamiento. Porque no lo olvidemos: aquí hay que repatirse el botín. Hoy me toca a mí en la Moncloa y a ti en Santiago, Madrid y Valencia. Además, está todo muy claro, se puede robar todo lo que haga falta, que no tendrá consecuencias en los sondeos o en los resultados electorales. Elecciones... otro espejismo, nos dejan votar de vez en cuando, asistir a debates de políticos en TV (¡incluso con gente "de verdad"!). La celebración de elecciones regulares ni genera una democracia ni es una garantía de la misma. No es un sistema participativo, eso no existe ni en las comunidades de vecinos.

Es cierto que si uno se pone a analizar mi credo político, doy más bien de "izquierdas", sobre todo en los temas de mayor controversia. Empiezo diciendo que la nueva ley del aborto me parece una basura, un remiendo de apariencia progresista cuando ni siquiera, ni siquiera, se suprime el delito de aborto del Código penal; se añade lo de los 16 años para que el debate se vaya por ahí y nadie se dé cuenta de que es todo un ejercicio de imagen, otro huesillo para el electorado de buen rollito. El derecho al aborto debería estar recogido y protegido en la Constitución, las mujeres poder hacer con su cuerpo lo que les dé la gana, que bastante traumático debe ser como para que encima la gente (sobre todo los hombres, que siempre son los que más ruido hacen, mírese dentro del PSOE) juzguen y opinen. Más opciones políticas: utilizo el transporte público, no tengo coche. Compro comida orgánica. Procuro no comprar nada fabricado en países en desarrollo donde pueda existir trabajo forzado. Procuro no comprar productos alimenticios que hayan viajado desde otro continente. No viajo por placer a países no democráticos o donde al menos no haya mínimos derechos garantizados para mujeres y hombres. Utilizo la sanidad pública. Pago el IVA y el IRPF religiosamente, sin quejarme. Creo en la redistribución de la riqueza por los poderes públicos (sí, ésos que están gestionados por los políticos que hace un segundo ponía a caldo; menos mal que tenemos al funcionariado, que se quejarán de todo pero hacen que las cosas funcionen). Creo en los servicios públicos.

Claro, que también soy un abogado del libre mercado, corregido (ya he dicho lo de la redistribución de la riqueza) pero libre. Creo en la igualdad... de oportunidades. Para mí ésa es la igualdad real, la que nos permite a todos acceder a los mismos beneficios pero con la posibilidad de mejorar (o empeorar) mediante nuestro trabajo y nuestro talento. No creo en la igualdad como objetivo, sino como premisa de partida. Creo en la libertad por encima de todo. En poder decir lo que piensas sin que nadie te pueda amenazar por ello. Y, también por encima de todo, detesto la moralidad organizada, ya sea religiosa o política.

Contradicciones: muchas. Todas. No compro comida que contenga "millas aéreas" y en lo que va de año llevo a cuestas (los he contado) 51 viajes en avión. No viajo a países no democráticos pero he estado, por placer, en Siria, Egipto y tantos otros. Mucho presumir de pagar impuestos pero anualmente contribuyo a un fondo de pensiones para pagar menos IRPF en primavera.

En realidad lo que me gustaría de verdad, y por eso he empezado esta entrada como lo he hecho, es poder tener un credo político absolutamente apolítico y preferentemente amoral. No llegaré a defender el asesinato, el canibalismo y la coprofagia como hace Divine, pero me encanta esa desfachatez, sobre todo por lo que supone de superación de los esquemas tradicionales de lo conservador/progresista. Sólo en una sociedad política tan podrida como eran los Estados Unidos en los años 70 cabía una filosofía vital tan radical. Bueno, locos hay en todas partes, pero locos travestidos obesos ("How is this for a centre spread?") no tantos.

Por cierto, he descubierto, casi por casualidad, la mejor web de los últimos tiempos, Cinema de Merde. Se trata de una página muy trabajada con críticas irreverentes y muy camp de todo tipo de películas. Recomiendan Pink Flamingos, Phantom of Paradise, Glitter, Xanadu y Roller Boogie, por ejemplo. La lleva un tipo barbudo con mucha pluma cuyos vídeos describiendo películas son muy divertidos. Recordadlo, lo leísteis aquí primero (aunque seguro que algún listillo ya la conocía).

En Internet, último reducto de la libertad, está todo. ¿Quién necesita credos políticos?

"Eat shit!".

14 comentarios:

theodore dijo...

Pues una vez más coincidimos practicamente al 100% en lo (a?)político, así que no te digo lo que opino porque casi lo suscribo todo, contradicciones incluidas. Tú lo cuentas mejor. Y además eres mucho más guapo.

Es una lástima que Divine hoy en día sea casi desconocida, supongo que al ser una figura tan punk, ahora ya no encaja en la nueva mentalidad post-Priscilla (ojo que me encanta esa peli) en la que la "trans"-gresión más grande es que una Prohibida o una Rupaul te digan "comeme el potorro, maaaaricón" (soy muy educado y no me permito decir "coño"). Y también es que John Waters anda desde hace una década como vaca sin cencerro, se ha quedado para chistes de caca-culo-pedo-pis sin chispa ninguna.

Y fíjate que alguna vez me topé también de casualidad con "cinema de Merde" y la dejé pasar. Gracias por la recomendación, le he estado echando un buen ojo y solamente con ver que su director favorito es Brian De Palma ya me tiene ganado :-)

You think you're a man. You are only a toy.

Stanwyck dijo...

Yo también estoy muy de acuerdo contigo, aunque sé que hay unas cuantas cosas en las que divergimos.
Voy raudo a Cinema de Merde. Esas películas que citas están entre mis favoritas de todos los tiempos, como sabes.
theodore: Brian la Palma del principio, antes de las malas copias Hitchcock.

Squirrel dijo...

Yo creo que Brian de Palma siempre, Stanwyck. Hasta cuando hace truños hay por dónde cogerlos. Es de lo mejor de siempre. Como John Waters. Cuando empecé a ver "The Wire" nada me sorprendía, pues conozco Baltimore d elas películas de JW. Ahora que lo pienso, dentro de poco lo conoceré de verdad... QUé nervios.

Qué rabia que coincidamos, yo que esperaba un poco de "moñeo", llevo unos días ne plan Coz ("las chicas son guerreras").

Theodore, es cierto, las trans no son lo que eran. Me encanta la escen de Pink Flamingos en que el exhibicionista le enseña su pilila a una chica, que luego le enseña a él la suya... Y a mí sí me gusta la palabra coño, la uso constantemente, como uso potorro, chumino, parrús y chocho (una vez un compañero d etrabajo dijo "como diría F, esto es un chochazo", yo negué que usase esa palabra, anye la hilaridad del restd e la gente).

Stanwyck, poco te conozco o estoy seguro de que el oso plumoso que lleva Cinema de merde te va a hacer muchísima gracias. Es que la tiene. La crítica de Xanadu es de lo mejor.

Finalmente, tendríamos que rescatar los discos-disco de Divine, ¿verdad? You're only a toy.

Manuel Sánchez de Nogués dijo...

Que bon dia a tots!!!

Estoy ahora en casa de un amigo que tiene un "pink flamingo" de plástico en tamaño natural en el jardín, como homenaje a la película,a Divine y a su autor. A mí ya hasta me gusta (el flamenco de plástico, no la película, que me gustó siempre)

Por supuesto que conozco el blog Cinema de Merde!!! Lo que pasa es que no quería pasar por mariculta, que luego llegan Theodore y Coxis y me escriben cosas como que no saben que comentar, que si tanta conocimiento y tanto viaje... Como dice mi amigo el del pink flamingo (uno tiene pocos amigos, pero escogidos): el agua del canal de Isabel II os da mucha sabiduría a los que vivís en Madrid...

Yo también estoy de acuerdo contigo, Breckin, faltaría más, pero con algunos matices. Yo debo ser de los tontos que aún cree en la honestidad de la política y que el voto sirve para poder cambiar cosas. La diferencia, en democracias consolidadas, como la española, entre derechas e izquierdas se basa en los matices. Pero es que los matices son muy importantes. Y por eso voto.

También, en mi caso, es una cuestión de piel, como cuando te enrollas con alguien y notas que el contacto físico de tu piel con la suya funciona. Por eso no voto a los del PP, porque mi piel y la de ellos son incompatibles.

(Lo de que conocía la web Cinema de Merde es broma. No tenía npi :)

Besos
Manuel

Squirrel dijo...

De acuerdo con lo de la piel, Manuel. Es cierto, hay gente a la que uno nunca votaría porque no. Hay matics, cierto, pero eso es lo que llamo los huesos para roer, al final te acabas decantando por el hueso que te parece más apetitoso.

Pero no puedo estar de acuerdo con eso de que somos "una democracia consolidada". Nada más lejano a la realidad. Lo siento, pero es así, y la culpa es nuestra. Nos hemos acistumbrado a no exigir nada a los políticos, ni siquiera sabemos quiénes son nuestros representantes locales. Nos conformamos con la gresca diaria ("Fíjate lo que ha dicho la Cospedal" "¿Será cierto que es lesbiana?") y la pantomima de ir a votar de vez en cuando. ¿Sabías que los senadores más votados son aquellos cuyos apellidos empiezan por "A"? ¿Sabes por qué? Porque son los primeros de la lista que sale en la papeleta rosa. Hay un porcentaje importante de gente que pone cruces a los tres primeros. Entre España y Haití, poca diferencia veo, la verdad en cuanto a la salud de nuestra democracia. Pero haces bien en creer en la honestidad de la política, para cínicos ya estamos los demás.

Oye, y presenta a tu amigo el de los flamencos rosas, que promete.

Manuel Sánchez de Nogués dijo...

Sin ánimo de polemizar (o con él ), pero sí, tenemos una democracia consolidada en España o, al menos más consolidada que en Honduras o Haití. Otra cosa es que sea perfecta. Y perfecta no lo es ni en Suecia, Alemania, Estados Unidos ni en ningún lado. Y por supuesto, tampoco en España: las polémicas sobre el cohecho impropio o las declaraciones de Cospedal, que acusa sin pruebas, con el único ánimo de ganar votos entre su potencial electorado, lo demuestran. También, como comentas en tu entrada, el hecho de que los casos de corrupción no le estén pasando factura al PP, constata la poca cultura democrática de muchos ciudadanos.

Con respecto a la papeleta del Senado, hace poco se ha aprobado un cambio de diseño con el fin de hacerlo "más práctico". Así, los nombres de los candidatos, que se agrupan por partidos, apareceran dentro de un recuadro para evitar, dicen, que el votante se confunda y vote a candidatos de otros partidos. Es cierto que el diseño anterior se prestaba a cierta confusión, pero meter a los candidatos en recuadros puede sugerir que se vote a todos los candidatos de ese partido (precisamente lo que los partidos quieren), cuando para el senado, el votante puede elegir hasta tres candidatos (dos en el caso de Ceuta y uno en el de las islas) de cualquier partido. Lo que parece es que los partidos quieren asegurarse que los electores voten a todos sus candidatos, como en un sistema de lista cerrada, similar al del Congreso de los Diputados, mediante un cambio en el diseño de la papeleta tendente a tal fin.

Además, el orden de aparición de los partidos en la papeleta no será por sorteo, como hasta ahora, sino que será por oden de votación en las elecciones anteriores. Así, PP y PSOE se aseguran aparecer siempre los primeros en la papeleta. El orden de los candidatos dentro del recuadro asignado a cada partido lo determinará el propio partido. La verdad, no sé que es peor, que el orden se determine alfabéticamente, o que te lo determine el partido.

http://www.elmundo.es/elmundo/2009/06/15/espana/1245091776.html

Y siento todo este rollo politico-electoral en plenas vacaciones.

Mi amigo Jose te encantaría. Y tú a él. Poseéis ambos una enorme cultura pop.

Un beso
M

coxis dijo...

Antes que nada, he ido raudo a visitar la web de Cinema de Merde y me he leído las críticas de Xanadú, Supergirl, Grease 2 y Pesadilla en Elm Street 2. ¡Qué gran descubrimiento! Me voy a pasar el día lee que te lee porque anda que no hay para elegir...

Y Pink Flamingos... Ya lo conté en un post previo pero como todavía no me conocías (ni me odiabas, parafraseando una de tus citas más sobresalientes) te lo explico. La cogí del vídeoclub con 13 años e hice un pase con mis hermanos primero y luego creo que la vieron mis padres, mi padre me dijo así muy serio "Hijo, no traigas más películas de esta clase..."

En cuanto a la política, ay hijo mío, es que está la cosa un poco jorobá. Mi corazón es de izquierdas y siempre voy a votar (llámame carca pero lo hago por mis abuelos y tio-abuelos que no pudieron hacerlo), pero estoy muy decepcionado con la poca altura de los políticos de hoy, desde Miss Pajín hasta Mr Trillo. Lo que me mosquea es que hay una generación de personas de mi edad (año arriba, año abajo) francamente rancias, que cuando hablan de política es mejor callarte porque si no terminas tirándote del moño con ellos, se portan como el taxista típico que te pone la COPE y empieza a despotricar, convencido que tiene la verdad absoluta (los socialistas son unos cabrones que hunden España, a ver si vuelve Aznar) y te mete en la conversación para que le des la razón, y tú, ante tal "hooliganismo", sólo te queda callarte porque para qué molestarte...

Y Mr Manuel, alardea de tó lo que sepas...

Squirrel dijo...

¡Moñeo, moñeo! Manuel, somos Haití. Pobres haitianos, ahora que lo pienso, que los compare a nosotros...

Claro que no somos Haití, ni Honduras, pero nuestra cultura democrática es nula. Si en todos los países "de nuestro entorno" (que alguien me explique qué significa eso, ¿Andorra? ¿Marruecos? ¿Francia?) la cultura política está dominada por los partidos, que no son otra cosa que agencias de colocación, en el nuestro ello se une a la somatización de la población y al absoluto desconocimiento de nuestros derechos y, aún peor, de nuestros deberes. Alguien inteligente lo dijo hace tiempo, en España no habrá otra guerra civil, la gente está demasiado preocupada comprando su TV de plasma o su coche nuevo, ésas son las prioridades. La clase política, aquí y en todas partes, es cada vez más lamentable. He citado Francia: mira a Sarkozy, ¿no es patético? Imagínate ahora a Ségolène Royal de Presidenta. Habría legalizado el matrimonio gay, así que le habríamos puesto una sonrisita. Pero ¿por cuánto tiempo? Es una política de medio pelo. Qué digo, ni siquiera. Es una loca.

En la versión inicial de mi post me había metido en el guirigay de EEUU (las empresas farmacéuticas se gastaron, de abril a junio, 133 millones de dólares en labores de lobby en el Congreso, chúpate esa mandarina), pero luego lo he dejado porque es demasiado complejo y aunque llevo unos días peleón mi capacidad de aguanta no va más allá de un par de asaltos. Pero en mis admirados EEUU, con mi idolatrado Obama al frente, las cosas no han cambiado un ápice. Halliburton y Aventis siguen con el mismo poder de antes. Que no hace sin ir en aumento. Claro, financian los partidos y a sus dirigentes. ¿Quién no quiere una casa más grande, un coche más rápido, un reloj más ostentoso?

Coxis, yo también voto. Mis abuelos también pudieron hacerlo, pero mi padre murió antes de poder. Voto porque es lo que me queda, aunque también soy el tipo de ciudadano pesadito que manda cartas a diputados y concejales. Y qué buenos ejemplos los de Trillo (paisano tuyo, ¿no?) y Pajín, que son ambos personas inteligentes, cegados por la misión que les encomienda su partido, al que se deben de manera casi irracional.

Ayer me tiré toda la tarde enganchado a Cinema de merde. Es lo mejor que he visto en mucho tiempo.

coxis dijo...

pues sí, Trillo, Zaplana y Martínez Pujalte los tres productos de la región murciana... Y aquí con mayoría absoluta per secula seculorum (pero es que si vieras a los del PSOE murciano te dan ganas de llorar mucho muchísimo, pierden elecciones con humillantes derrotas pero no se va ni uno...)

Y buen domingo, que antes no te lo he dicho, canastos.

Squirrel dijo...

Coxis, buen domingo tengamos todos... Y perdona que olvidé comentar la parte más jugosa d etu comentario, referente a la sesión de pink flamingos con tus hermanos. Demuestra que eres de verdad, como dice Mocho, la worsa y, por lo tanto, lo mejor de lo mejor. Imagino a tus padres viendo la escena del culo cantarín...

molano dijo...

Esa democracia de ciudadanos enterados y participativos requeriría una nueva definición del ser humano. Mientras tanto hay que intentar arreglar esto que tenemos y que defines estupendamente.

polo dijo...

Me da un poco de corajillo que haya menos comentarios en una entrada tan jugosísima como esta. Te lo digo de verdad. Sí: un poco de enfado también.

Es cierto que es valiente hoy en día definirse en una ideología. Me gusta decir "izquierdas" o "derechas" porque no hay solo una. Y se puede decir.

Qué gran verdad lo del huesito. El matrimonio homosexual es el ejemplo perfecto. Es un hueso dedicado para aquellos que han atacado el matrimonio toda su vida sean gays o no. Es lo más curioso: después va y les gusta.

Que conste que una pareja homo tiene el mismo derecho a casarse que los otros. Pero que eso dé votos... ¿no es un poco infantil? Conformaros con eso, lobby de turno.

Y tu excelente reflexión sobre la idea de introducir un papelito en una caja, papelito lleno de nombres de personas que, por lo general, desconocemos. Eso es demo...¿qué? En todo caso, un ejemplo de DEDOcracia.

Vale: es lo menos malo que hay, pero me parece muy bien la pegatina que dejaron en algunos contenedores de basura: "Deposite aquí su voto". Total: muchas veces da lo mismo.

El botín es verdaderamente suculento. Pero ¿quién se lleva la gran parte del botín? Me temo que, más que los partidos políticos, son los señores responsables de:
- bancos
- industria farmacéutica
- ejército
- familias reales
- empreses multinacionales
- gobiernos de países más poderosos
- jerarquia religiosa (católica en nuestro país y de otros credos en otros países)
- no se me ocurre más ahora (y estaría bien que me echaras una mano)

[...Ya me dijo una vez Teodoro que yo me explayaba en los comentarios en lugar de en mi propio blog]

Esta pequeña lista de poderes contiene personas invisibles. Salen de vez en cuando para que no se note mucho, pero estoy convencido de que cuentan mucho más que un gobierno y que un parlamento.

Conozco a mucha pero que mucha gente del PSOE que lleva una vida de lo que yo llamo más FACHA: el primer ejemplo es el del transporte público: es decir, con su coche a todas partes. Después son unos déspotas de cuidado. Por ahí hay que empezar además del sitio donde se hace la compra, qué se compra, etc, etc.

Por eso a mí el psoe no me puede caer bien. ¿La ley del aborto? ¿En la Constitución? Mejor en una nueva porque en 1978 no estábamos para ello: no habría salido para adelante y estaríamos todavía dándonos ...tortas.

Sin querer salirme mucho del tema, opino que dejar fuera a los padres en una decisión como la de abortar me parece una grave irresponsabilidad. Si yo fuera papá y me enterara, sería uno de los palos más gordos de mi vida. O bien establézcase la mayoría de edad a los 16 años si es que tanto hemos evolucionado (que no es así pues he tenido muuuchas nenas de esa edad como alumnas y muuuuchos padres de esas nenas).

Ese es otro huesito. Para contentar al lobby feminista. No creo que sea para, realmente, ayudar a la población.

SIGUE EN OTRO COMENTARIO

polo dijo...

Lo de los debates electorales es de risa. Me los tomo como tal y por eso me gustan. Los dos últimos de loR dos "líderes" (ja ja: ¡"líderes"!) de psoe y pp parecían discusiones de niños chicos sacando gráficos hechos cutremente.

Uno, con La Niña, y el otro, con el Buenas Noches, Buena Suerte: uno, ñoño y fuera de este mundo; el otro, supuesto cinéfilo pedante con un HORROR de película e inculto con un mal castellano: en español se desea "suerte" sin adjetivo. Para eso les sirven los asesores que -aunque odio esta frase tan derechosa- los pagamos todos. No tienen altura ninguna.

Lo de las autonomías me parece el hueso peor de todo. El MacGuffin (¿se me entiende?)que nos distrae de la base de la vida.

Con el libre mercado tengo mis dudas. Una vez haré un blog con un programa político de un fantástico Partido Radical y que redacté no precisamente en tiempos de adolescencia sino hace pocos años.

La primera premisa era "Nacionalización de la banca". Tengo mis dudas, pero es que son los primeros de la lista de poderes invisibles e intocables. Precisamente por invisibles. Porque no se presentan a las erecciones (aparentemente).

Finalmente, Internet. Es verdad que es fascinante porque es reducto de la libertad. Cuando mi señora madre me preguntó ayer después de haber vuelto yo del cibercafé del pueblo más cercano "Pero, niño, ¿tú qué haces con Internet?", la respuesta fue "TODO". Mencioné escribir cartas, leer la prensa y recuperar amigos, pero faltó practicar el sexo y charlar durante horas... Y escribir en blogs maravillosos.

Una última reflexión no por patética no menos cierta. En supuestos tiempos de bonanza, aumenta el poder militar. El poder militar crea poderío e instrumentos. Internet fue y seguirá siendo un arma militar. Debería yo escarbar y encontrar un terrorífico artículo publicado años ha en la estupenda revista Mondo Brutto (¿la conoces?) en el que enumeraban cómo a cualquier usuario de Internet le tienen controlada la vida.

No creo que esos poderes se reúnan en una mesa. Creo que están tan bien organizados que, pase lo que pase, siempre están bien situados. Y no es envidia. Se lo tienen ganado. Y tampoco nos podemos quejar, que en Occidente se vive muy bien. Otra cosa es que sea justo y demo...

[Te agradecería, Breckin´, que comentaras esto que te he escrito y, también, que me aconsejaras algún libro -cortito por favor- sobre estos temas, sobre todo, si van en la línea de lo que pienso -je, je: esto es Necesidad de Aprobación]

Gracias por hablar de estos temas tan chulos.

Squirrel dijo...

Polo, empiezo dándote las gracias por un comentario tan jugosísimo. Yo tengo muy claro que los blogs dependen de los comentarios que en ellos se hagan, es lo más importante, el intercambio de opiniones.

Pues sí, a mí tampoco me parece que la división izquierda-derecha sea válida ya, en la actualidad es puro artificio. pero es FÁCIL. Va unida a la necesidad humana de compartimentalizarlo todo en compartimentos tan estancos como sea posible. La izquierda y la derecha sólo SÓLO quieren el poder para beneficiarse de él. Iba a escribir que también para imponer sus ideas, pero yo creo que ya ni eso, porque no hay ideas, sólo ambición, intereses económicos/militares/sociales y una bateria de recriminaciones, escándalos, acusaciones.

Los políticos no son quienes se llevan el botín a casa, pero ayudan a que otros lo hagan y ellos se esperan a haber desaparecido del mapa político para beneficiarse igualmente (Aznar, anyone?). Lo mismo pasa con el poder militar (no, no conozco Mondo Brutto, pero ya me pongo a buscar). Te gustará el libro de Howard Zinn que recomiendo en la entrada "Estados Unidos", es sumamente clarividente.

Yo he renunciado hace mucho al juego de los partidos aunque en una época pensé que me metería en uno o formaría otro. Ahora voy a votar porque no tengo más remedio y me he resignado a tener un mal sistema, peores políticos y una pésima gestión (sobre todo en las CCAA, totalmente de acuerdo contigo) de las arcas públicas. A veces me intereso por agrupaciones tipo el partido antitaurino o el partido ateo y me doy cuenta de que encajo aún menos que en los partidos principales.

No estoy de acuerdo contigo respecto al aborto. De hecho siempre he pensado que los hombres no tenemos que tener opinión al respecto, porque debe ser una decisión de cada mujer en cada momento. Nosotros ni nos imaginamos lo que es que te digan lo que puedes hacer con tu cuerpo. Porque el miedo al aborto (cuya práctica es muy anterior a cualquier religión, desde luego a las monoteístas) no es otra cosa que el miedo de los hombres a que las mujeres puedan disfrutar libremente de su cuerpo o su sexualidad. Para nosotros, un desliz sexual lo peor que nos puede traer es VIH, alguna ETS, alguna ladilla, algún desengaño. De nada de eso nos morimos ya en el mundo occidental. En el caso de las mujeres se añade la posibilidad de tener un hijo no deseado, del que tendrán que ocuparse durante 25 o más años, alimentarlo, vestirlo, educarlo, enseñarlo, ayudarlo. Deben tener el derecho a elegir cuando tienen sus hijos y también cuando no los tienen. A los 25, 40, ó 16 (en mi opinión, incluso menos) años. No podemos forzarles a que tengan un hijo o incluso a que cuenten con el visto bueno de sus padres (algo que equivale a decirles: no abortes) sólo porque "me parece mal". No. Nada de moralidades, nunca.

Y qué razón tienes cuando escribes al final que no podemos quejarnos, vivimos en el mejor mundo posible, aunque sea un asquito.

Gracias, gracias, gracias. Me animas a escribir más de temas políticos. Cuando esté en pleno ajo en Washington DC seguro que lo hago más a menudo.